jueves, 27 de enero de 2011

Color y sabor para los alimentos

Condimentos: sal, hierbas aromáticas, especias, vinagre
Si buscamos nutrientes o valor dietético en los condimentos (sal, vinagre, hierbas aromáticas, especias...) algo hay, pero siempre en cantidades insignificantes. Y ese es precisamente uno de sus rasgos definitorios: añaden color y sabor a los alimentos sin alterarlos sustancialmente
Conseguir platos apetecibles y sabrosos, originales o llamativos, mediante el uso de condimentos, es cuestión de técnica y sapiencia culinaria, que nos permitirán elegir correctamente los condimentos que transforman una receta mediocre en un plato especial. Para usarlos con acierto, habremos de conocer y distinguir los sabores y aromas de cada condimento, y los que surgen al combinar varios de ellos. Según los especialistas en gastronomía, los condimentos deben proporcionar un contraste o un aroma al plato, pero sin anular el sabor real del ingrediente principal. La regla general aconseja que se añadan en modesta cantidad y poco antes de acabar el cocinado del plato, dejándolos cocer un rato para que el plato pueda extraer de ellos su máximo sabor. Los más usados son: hierbas aromáticas, sal, vinagre, limón, ajo y especias como pimienta blanca o negra, clavo, nuez mascada.
Hierbas aromáticas
Las hierbas aromáticas se usan en la cocina tanto con fines gastronómicos como con la intención de conseguir los beneficiosos efectos que algunas plantas medicinales podrían generar en nuestro organismo. Se han de emplear siempre en dosis controladas y teniendo en cuenta sus posibles efectos secundarios. Su delicado sabor puede reemplazar, incluso con ventaja, al de muchas especias. A excepción del laurel, que se usa en seco, las hierbas aromáticas aportan más sabor y aroma a los platos si son frescas. Gracias a los aceites esenciales que contienen, constituyen un acompañamiento idóneo para los alimentos. Sus propiedades son:
  • Eupépticas (tonifican los procesos digestivos y facilitan la digestión): eneldo, alcaparras, laurel, salvia, romero, perejil, albahaca, tomillo, comino, ajedrea.
  • Carminativas (evitan o reducen los gases intestinales): eneldo, hinojo, laurel, tomillo, anís verde, orégano, ajedrea (sustituta, más saludable, de la pimienta).
  • Antisépticas (inhiben el crecimiento de los microbios): ajo, limón, tomillo, salvia.
Condimentos ácidos
  • Vinagre: Se obtiene por fermentación del vino de uva, aunque también los hay de manzana, frambuesa  y puede estar aromatizado con hierbas. Por su acidez, su consumo no está indicado en personas de estómago delicado, pero utilizado con mesura aporta un contrapunto interesante en aliños, verduras, pescados a la plancha y en algunas salsas.
  • Limón: Reemplaza, y con ventaja, al vinagre. Realza el sabor del pescado blanco y le confiere firmeza si se macera en crudo. En la elaboración de postres dulces, el limón corrige sabores demasiado dulces, o aporta contraste cuando las frutas utilizadas adolecen de poco sabor. para quien sigue una dieta de protección gástrica, el limón es más adecuado en los aliños que el vinagre. Añadido su jugo a los platos, encubre en parte la falta de sal, lo que agradecen quienes han de respetar una dieta hipo sódica, baja en sal.
Especias
La mayoría de las especias estimulan los procesos digestivos y evitan las flatulencias, pero resultan excitantes e irritan la mucosa gástrica. Es por ello que deben emplearse en muy poca cantidad. No conviene que los incluyan en su dieta quienes padecen de estómago delicado (gastritis, úlceras), pero son interesantes para regímenes hipo sódicos, ya que concentran bastante sabor y pueden sustituir en parte a la sal.
  • Chile: Fruto de sabor muy picante, debido al alcaloide capsaicina. Se desaconseja su uso en caso de úlcera gastroduodenal, gastritis, colitis ulcerosa y hemorroides.
  • Pimienta: Frutos secos con cáscara (pimienta negra) o sin ella (pimienta blanca) que provienen de un arbusto originario de la India. Su sabor picante, más intenso en la pimienta negra, se debe al alcaloide piperina, que estimula la producción de jugos digestivos a base de irritar e inflamar las mucosas digestivas.
  • Pimentón: Pimiento rojo, seco y molido. Si es picante, se debe añadir a los guisos en muy pequeña cantidad, por su concentrado sabor.
  • Clavo: Posee propiedades aperitivas y carminativas, aunque en dosis elevadas irrita el conducto digestivo.
  • Jengibre: De sabor dulce e intensamente aromático, se emplea en guisos y para frutas en conserva. Durante el procesado y almacenamiento del jengibre, el gingerol (principio picante), se transforma en otro compuesto con sabor picante más intenso.
El ajo, la cebolla y otros condimentos aliáceos
Son de digestibilidad difícil, sobre todo cuando se emplean crudos o rehogados en aceite. No conviene que los ingieran de ese modo quienes tienen estómago delicado. Cocidos resultan más suaves, de ahí que se pueda utilizar cebolla o puerro como aromatizantes de un caldo.
  • Ajo: Su sabor picante reemplaza al de las especias más fuertes. Ofrece muchas propiedades: antiséptico, diurético¿
  • Cebolla: Si se emplea cruda para ensaladas, debe dejarse en remojo en agua fría para que no resulte demasiado fuerte. También se puede emplear cebolleta, más suave que la cebolla.
  • Puerro: Más dulce y suave que la cebolla.
  • Chalota: Más suave que la cebolla y el ajo
Ventajas de los condimentos
  • Son aperitivos: estimulan el apetito, ya que al aumentar el sabor y aroma de los platos incitan a comer más.
  • Aumentan las secreciones digestivas: provocan un incremento en el volumen de las secreciones que normalmente se vierten al conducto digestivo (desde la saliva hasta el jugo intestinal), necesarias para la digestión.
  • Reducen la flatulencia: muchas hierbas aromáticas contienen esencias de acción carminativa, ayudan a disminuir los gases intestinales.
  • Pueden sustituir a la sal: permiten reducir la cantidad de sal que se añade a los alimentos, lo que es muy positivo para hipertensos y quienes padecen insuficiencia cardiaca o renal.
  • Favorecen la conservación de los alimentos: el tomillo, el chile y especias como el clavo o la canela, poseen propiedades anti fúngicas, al inhibir el crecimiento de hongos.
Inconvenientes de los condimentos
  • Irritan la mucosa del estómago: las especias picantes logran una mayor producción de jugo, especialmente del gástrico (en el estómago) como consecuencia de la irritación o inflamación que causan en la mucosa del estómago.
  • Alergias: son numerosos los casos de alergia facial (picor de nariz, estornudos, tos), digestiva (dolores abdominales, picor anal) o cutánea causados por contacto con la piel, por inhalación del polvillo que desprenden o por ingestión de diversas especias.
  • Habituación: el sentido del gusto se habitúa a las especias, con lo que los alimentos en su estado natural resultan insípidos y se precisa aumentar la cantidad para obtener la misma sensación.
  • Ocultan el deterioro de los alimentos: antes de que existieran los modernos métodos de conservación (refrigeración, congelación, aditivos...), las especias se usaban para enmascarar el mal estado de alimentos contaminados o en descomposición, especialmente carnes y pescados.
  • Aumentan la necesidad de ingerir líquido con la comida, lo que diluye los jugos gástricos y hace más lenta la digestión de los alimentos.



miércoles, 26 de enero de 2011

Más condimentos

Especias y condimentos, un toque de sabor en nuestra mesa

Las hierbas aromáticas y culinarias realzan el sabor de los platos, pero algunos de ellos están contraindicados en determinadas afecciones digestivas
El sabor de las especias es un regalo del continente asiático (excepto la vainilla, el pimiento picante o chile y la pimienta de Jamaica que provienen de América); en cambio la mayoría de las hierbas aromáticas con aplicaciones culinarias son de origen mediterráneo.
Condimentos y especias más habituales: Clasificación, indicaciones y contraindicaciones Ácidos - Vinagre: Se obtiene generalmente por fermentación del vino de uva, aunque también los hay de manzana, frambuesa, y puede estar aromatizado con hierbas aromáticas. Su consumo no está indicado en caso de estómago delicado por su acidez, pero utilizado con medida, aporta un contrapunto interesante en aliños, verduras, pescados a la plancha y en algunas salsas.

- Limón. Reemplaza con ventaja al vinagre. Realza el sabor del pescado blanco y le da firmeza si se macera en crudo. En la elaboración de postres dulces, un poco de limón corrige sabores demasiado dulces, o aporta contraste cuando las frutas utilizadas tienen poco sabor. Si se sigue una dieta de protección gástrica, el limón es más suave para los aliños que el vinagre. Añadido su jugo a los platos, encubre un poco la falta de sal, en caso de seguir una dieta hipo sódico.
Acres Resultan excitantes e irritan la mucosa gástrica por lo que deben emplearse en muy poca cantidad. Quienes padecen de estómago delicado (gastritis, úlceras), no conviene que los incluyan en su dieta. En cambio para regímenes hipo sódicos pueden resultar interesantes ya que concentran bastante sabor. Eso sí, en pequeñas dosis, nuestro estómago nos lo agradecerá.
- Chile (pimiento picante). Fruto de sabor muy picante debido a la presencia del alcaloide capsaicina. Existen razones para desaconsejar su uso en caso de úlcera gastroduodenal, gastritis, colitis ulcerosa y hemorroides.

- Pimienta. Son los frutos secos con cáscara (pimienta negra) o sin ella (pimienta blanca) de un arbusto originario de la India. Su sabor picante, más intenso en la pimienta negra, se debe al alcaloide piperina, que estimula la producción de jugos digestivos a base de irritar e inflamar las mucosas digestivas. Este compuesto picante es sensible a la luz, volviéndose más insípido.

- Pimentón: Es un tipo de pimiento rojo, seco y molido. Si es picante se debe añadir a los guisos en muy pequeña cantidad, por su concentrado sabor.

- Clavo. Posee propiedades aperitivas y carminativas, aunque en dosis elevadas resulta irritante del conducto digestivo.

- Jengibre. Tiene un sabor dulce e intensamente aromático, por lo que se emplea en diversos guisos, así como frutas en conserva. Durante el procesado y almacenamiento del jengibre, el gingerol (principio picante), se transforma en otro compuesto con sabor picante más intenso.
Aliáceos Tienen una digestibilidad difícil, sobre todo cuando se emplean crudos o rehogados en aceite, por lo tanto, no conviene utilizar de esa manera en caso de estómago delicado. Cocidos resultan más suaves, de ahí, que no resulte contraproducente utilizar cebolla o puerro como aromatizantes de un caldo en este tipo de regímenes.
- Ajo. Su sabor picante reemplaza con ventaja al de las especias más fuertes. Con muchas propiedades: antiséptico, diurético.

- Cebolla. Si se emplea cruda para ensaladas, debe dejarse en remojo en agua fría, para que no resulte demasiado fuerte, o si no se puede emplear cebolleta (cebolla fresca), más suave que la cebolla de guisar.

- Puerro. Es más dulce y suave que la cebolla.

- Chalota. De sabor entre la cebolla y el ajo, algo más suave que éstos.

martes, 25 de enero de 2011

Variedad de condimentos


Condimentos
¿Quieres saber más acerca de los diversos condimentos para darle un gustito especial a tus comidas? He aquí una reseña con algunas definiciones y datos, que, si eres principiante será de gran utilidad. Estas sustancias que son de origen vegetal y con poco valor nutritivo, se usan en pequeña cantidad, pero ello alcanza para otorgar sabor, aroma y estimular el apetito.

Adobo: Es una receta española, se utiliza para sazonar carnes que se asan al horno o parrilla y salsas.

Ají: Originario de España y Hungría. Son morrones grandes, dulces y aromáticos. Se usan como adorno, condimento y para dar color a ensaladas, mayonesa, salsa chile y patatas asadas.

Albahaca: Originaria de la India, hojas de aroma y sabor inconfundibles. Tiene afinidad con los tomates, pastas, salsas y quesos suaves.

Alcaparras: Semillas originarias del Mediterráneo, se preparan en vinagre para usar como condimento.

Anís: Semilla de una fruta. Se utiliza espolvoreada sobre pan, tortas y galletitas.

Apio: Forma parte de la familia del perejil. Las hojas se utilizan en sopas y los tallos en ensaladas.

Azafrán: Originario de España. Se obtiene de la flor de azafrán. Se usa como condimento para el arroz, también condimentar carnes y para dar color a los panes.

Canela: Corteza de un árbol originario de Oriente, se usa en trozos o molida. Es para condimentar comidas dulces, galletas, tortas, panes y pickles dulces.

Ciboulette: Originario de Europa, se usa fresca y picada en sopas de crema, huevos revueltos y ensaladas.

Cilantro: La hoja es popular como guarnición en la cocina asiática y Oriente medio.
La semilla tiene un sabor dulce con un toque picante; se usa para condimentar carne picada, salchichas, estofados y platos de verduras. Su aceite perfuma el chocolate y otras bebidas.


Clavo: Se puede usar entero o molido. Se puede condimentar jamón, dulces, pickles, caramelos, tortas y budines.

Jengibre: Originario de África y Oriente. Se usa en polvo o fresco y seco. Tanto para comidas saladas como dulces.

Hierba de eneldo: Hojas aromáticas que se usan en ensaladas, vinagres, conservas y platos de pescados.

Laurel: Hojas del árbol de laurel que se secan antes de usar como condimento de carnes, sopas, guisos y salsas.

Menta: Hoja de mata de jardín. Especialmente sabrosa para carne de cordero, es sopas o en refrescos preparados con té.

Nuez moscada: Original de Oriente, se utiliza molida y da sabor a chorizos, tortas, budines, sopas y cremas. Es aromática y picante.

Orégano: Hojas pequeñas de una hierba aromática y dulce. Condimenta guisos, carne de cordero, de vaca, pizza y también ensaladas.

Perejil: Hojas que se utilizan como condimentos de ensaladas, salsa, carne de aves, pescado y queso. Tiene mucha vitamina A.

Pimiento: Fruta de enredadera se usa en grano o molida. Tiene un aroma agradable y es algo picante; Hay pimienta negra y pimienta blanca que es más picante.

Romero: Se usa para condimentar cordero, guisos, salsas y todas las carnes. Muy aromático.

Semillas de amapola: Originaria de Holanda y Turquía. La semilla azul se usa para espolvorear la corteza del pan, para tortas, bizcochos o galletitas.

Tomillo: De origen Español y Francés. Se utiliza el cabo y las hojas de esta hierba de jardín. Condimenta sopas, verduras, carnes y para condimentar almejas.

Vainilla: Chaucha de color marrón; se usa en forma de extracto generalmente para la repostería.


lunes, 24 de enero de 2011

ESPECIAS Y CONDIMENTOS

Duendes de la cocina
Las especias favorecen la digestión, realzan el sabor de la comida y dan un toque distinto a platos corrientes. Basta una pizca de estos "polvos mágicos “y nuestra mesa se convierte en una alfombra, también mágica, que nos transporta hacia horizontes lejanos. Pero más allá del placer sensorio, hoy en día los condimentos se hacen muy necesarios en nuestra alimentación cotidiana.
El conocimiento de las especias y su aporte a la nutrición, están entre las más antiguas adquisiciones de la humanidad. Incluso si miramos un libro de cocina del siglo XIX o un viejo herbario de la Edad Media, podemos comprobar que nuestros antepasados sabían mucho más que nosotros. Gran parte de las tradiciones culinarias y medicinales de entonces se han perdido. Hoy utilizamos muy pocas especias, a pesar que nuestros desvitalizados alimentos modernos están particularmente necesitados del "arte de condimentar".
Es bien sabido que, aunque la comida sea sana, bien combinada y abundante, si no genera placer, no se metabolizará correctamente. El acto de "gustar “alcanza nuestras fibras más intimas. Pero esta experiencia consciente, mediante la cual comienza el proceso digestivo, no es la única que incumbe al éxito de la digestión de los alimentos. El proceso digestivo, que también se desarrolla en el subconsciente (siendo entonces objetivo y no subjetivo), depende en gran medida de la excitación del sentido del gusto.
La degustación es un proceso sensorial que inicia en la boca y está ligada a un medio líquido. Del mismo modo, la percepción de los olores depende de la repartición muy sutil de la sustancia en un medio gaseoso. Solo podemos gustar lo que está disuelto en un medio líquido; debido a ello "se nos hace agua la boca “cuándo probamos un alimento sabroso. La saliva es pues el medio indispensable para la gustación. Sobre este punto, la moderna ciencia de la nutrición ha hecho importantes descubrimientos. Ha establecido que cuanto más monótono sea nuestro régimen alimenticio, más se despierta en nosotros el deseo de variar nuestras sensaciones gustativas, completándolas con especias y condimentos. Esta modificación de los sabores tiene una repercusión general sobre la fisiología de la nutrición. De hecho, es el placer ligado a los olores y sabores lo que nos incita a comer en cantidad suficiente.
Se ha podido demostrar que añadir especias produce una mayor abundancia de secreción salivar. Las especias, al favorecer la salivación refuerzan nuestra actividad digestiva. Esta acción de las especias está ligada a un contacto inmediato con los órganos sensoriales de la cavidad bucal y de la garganta. Los platos de comida activan nuestra experiencia sensorial y es únicamente a continuación que aparece un aumento del flujo salivar.
Pero hoy sabemos también que el aumento del flujo salivar excita la secreción de otros jugos digestivos. Esto quiere decir que la sensación gustativa consciente, favorece las creaciones subconscientes del aparato digestivo. El jugo gástrico, el jugo intestinal, el jugo pancreático y la bilis circulan más abundantemente. Todos estos jugos aumentan el poder de la digestión y la fuerza de descomposición, posibilitando un dominio más rápido sobre la materia alimenticia.



Condimentos

Desventajas de los condimentos

Irritan la mucosa del estómago: las especias picantes logran una mayor producción de jugo, especialmente del gástrico (en el estómago) como consecuencia de la irritación o inflamación que causan en la mucosa del estómago.

Alergias: son numerosos los casos de alergia facial (picor de nariz, estornudos, tos), digestiva (dolores abdominales, picor anal) o cutánea causados por contacto con la piel, por inhalación del polvillo que desprenden o por ingestión de diversas especias.

Habituación: el sentido del gusto se habitúa a las especias, con lo que los alimentos en su estado natural resultan insípidos y se precisa aumentar la cantidad para obtener la misma sensación.

Ocultan el deterioro de los alimentos: antes de que existieran los modernos métodos de conservación (refrigeración, congelación, aditivos...), las especias se usaban para enmascarar el mal estado de alimentos contaminados o en descomposición, especialmente carnes y pescados.

Aumentan la necesidad de ingerir líquido con la comida, lo que diluye los jugos gástricos y hace más lenta la digestión de los alimentos.


viernes, 21 de enero de 2011

¿Qué es la Carne?

¿Qué nutrientes nos aportan?
Todas las carnes están englobadas dentro de los alimentos proteicos y nos proporcionan entre un 15 y 20% de proteínas, que son consideradas de muy buena calidad ya que proporcionan todos los aminoácidos esenciales necesarios.
Son la mejor fuente de hierro y vitamina B 12.
Aportan entre un 10 y un 20% de grasa (la mayor parte de ella es saturada), tienen escasa cantidad de carbohidratos y el contenido en agua oscila entre un 50 y 80%.
Además nos aportan vitaminas del grupo B, zinc y fósforo.


¿De qué se compone la carne?
Sobre todo de tejido muscular, en él se encuentra la mioglobina que es un pigmento que le da su color característico que en contacto con el aire cambia y esto hace que el corte exterior sea más oscuro que la zona interior. La mayor o menor intensidad en el color rojo no afecta ni al valor nutritivo ni a su digestibilidad.
También contiene tejido graso, que puede ser visible o invisible (grasa interfascicular).
Cuanta más cantidad de grasa tenga una carne, menor contenido de agua tiene. La cantidad de grasa influye en su valor nutritivo y en la digestibilidad.
Finalmente tejido conectivo, que es el que separa o recubre los grandes músculos y también los tendones. Su cantidad depende del grupo muscular, aumenta con la edad y el ejercicio que haya realizado el animal, haciendo que la carne sea más dura.

¿Qué factores influyen en la composición nutricional de las carnes?
La edad del animal y la cantidad de ejercicio que realice.
La alimentación, principalmente si es de tipo industrial, influye notablemente en el contenido y tipo grasa. Cada raza, así como el grupo muscular del que se trate van a tener diferentes composiciones.

¿Cuáles son los tipos de carne atendiendo al contenido en grasa?
Carnes magras son aquellas con menos del 10 % de materia grasa, de forma genérica se le considera a la de caballo, ternera, conejo y pollo.
Las consideradas grasas son aquellas con un contenido superior al 10% tenemos: el cordero, el cerdo y el pato. De forma más específica, habría que tener en cuenta la pieza del animal, por ejemplo ciertas partes del cerdo como el solomillo, el jamón y el lomo, o la lengua y el corazón de todos los animales, habría que incluirlas dentro del primer grupo.

¿Cuáles son las recomendaciones de consumo?
La ración recomendada es: 150 - 200 g, 3 veces por semana en adultos y en niños las raciones serían de unos 15 g por cada año de edad que se ingerirán igualmente unas 3 veces por semana.
Las diversas categorías (extra, 1ª, 2ª, etc.) no presentan grandes diferencias en la composición nutricional, sí a la hora de elegir el modo de cocinado. La cocción lenta estaría indicada en categorías inferiores, mientras que para asar, freír o plancha las más recomendadas son la de extra, la de 1ª y de la zona más musculosa del animal.



jueves, 20 de enero de 2011

Novedad

Toallas absorbentes: la mejor opción para la piscina y gimnasio

En la piscina si nos mojamos después hay que secarse y resulta muy engorroso llevarse una toalla de grandes dimensiones. Las toallas absorbentes ya casi forman parte del panorama de piscinas cubiertas. Son pequeñas, muy eficaces para secarnos y fáciles de transportar.
El mecanismo es similar al de una bayeta absorbente, sólo que el tacto es mucho más suave. Con una sola pasada el agua desaparece de nuestro cuerpo. Si se llena de agua sólo hay que estrujarla y vuelta a empezar. Un recurso muy cómodo para la piscina.
También se están viendo estas toallas en los gimnasios, ya que son muy eficaces para la hora de quitar el sudor, mucho más que las convencionales, y en una clase de spinning por ejemplo, sudar se suda de lo lindo. El poco peso y reducido tamaño también hace que sea un buen recurso para las rutas de tracking de varios días.





La carne y sus derivados

¿Qué es la carne?

Según el código alimentario, es la parte comestible de los músculos de animales sacrificados en condiciones higiénicas, incluye (vaca, oveja, cerdo, cabra, caballo y camélidos sanos, y se aplica también a animales de corral, caza, de pelo y plumas y mamíferos marinos, declarados aptos para el consumo humano.

¿Qué nutrientes nos aportan?

Todas las carnes están englobadas dentro de los alimentos proteicos y nos proporcionan entre un 15 y 20% de proteínas, que son consideradas de muy buena calidad ya que proporcionan todos los aminoácidos esenciales necesarios.
Son la mejor fuente de hierro y vitamina B 12.
Aportan entre un 10 y un 20% de grasa (la mayor parte de ella es saturada), tienen escasa cantidad de carbohidratos y el contenido en agua oscila entre un 50 y 80%.
Además nos aportan vitaminas del grupo B, zinc y fósforo.

¿De qué se compone la carne?

  • Sobre todo de tejido muscular, en él se encuentra la mioglobina que es un pigmento que le da su color característico que en contacto con el aire cambia y esto hace que el corte exterior sea más oscuro que la zona interior. La mayor o menor intensidad en el color rojo no afecta ni al valor nutritivo ni a su digestibilidad.
  • También contiene tejido graso graso, que puede ser visible o invisible (grasa interfascicular). Cuanta más cantidad de grasa tenga una carne, menor contenido de agua tiene. La cantidad de grasa influye en su valor nutritivo y en la digestibilidad.
  • Finalmente tejido conectivo, que es el que separa o recubre los grandes músculos y también los tendones. Su cantidad depende del grupo muscular, aumenta con la edad y el ejercicio que haya realizado el animal, haciendo que la carne sea más dura.

¿Qué factores influyen en la composición nutricional de las carnes?
La edad del animal y la cantidad de ejercicio que realice.
La alimentación, principalmente si es de tipo industrial, influye notablemente en el contenido y tipo grasa. Cada raza, así como el grupo muscular del que se trate van a tener diferentes composiciones.

¿Cuáles son los tipos de carne atendiendo al contenido en grasa?
Carnes magras son aquellas con menos del 10 % de materia grasa, de forma genérica se le considera a la de caballo, ternera, conejo y pollo.
Las consideradas grasas son aquellas con un contenido superior al 10% tenemos: el cordero, el cerdo y el pato. De forma más específica, habría que tener en cuenta la pieza del animal, por ejemplo ciertas partes del cerdo como el solomillo, el jamón y el lomo, o la lengua y el corazón de todos los animales, habría que incluirlas dentro del primer grupo.

¿Cuáles son las recomendaciones de consumo?

La ración recomendada es: 150 - 200 g, 3 veces por semana en adultos y en niños las raciones serían de unos 15 g por cada año de edad que se ingerirán igualmente unas 3 veces por semana.
Las diversas categorías (extra, 1ª, 2ª, etc.) no presentan grandes diferencias en la composición nutricional, sí a la hora de elegir el modo de cocinado. La cocción lenta estaría indicada en categorías inferiores, mientras que para asar, freír o plancha las más recomendadas son la de extra, la de 1ª y de la zona más musculosa del animal.



miércoles, 19 de enero de 2011

Acerca de carnes

La carne, ¿roja o blanca?

La carne es un alimento habitual de nuestra dieta, de hecho nos aporta cantidad de nutrientes, aunque no se recomienda un consumo abusivo de ella, sino que lo ideal es consumirla unas cuatro veces por semana. Pero cuando lo hacemos nos surge la duda de si es mejor la carne roja o la blanca.

La carne es un alimento que nos aporta grandes cantidades de proteínas necesarias para el buen funcionamiento del organismo. Son de gran calidad y fácilmente asimilables, por lo que constituyen uno de los alimentos fundamentales de nuestros músculos. Esto es lo que convierte a la carne en un aliado de personas en edad de crecimiento o en deportistas. Pero el problema está en saber qué tipo de carne es el que más nos conviene y cuál será mejor para nuestra salud.

Las carnes se diferencian en dos tipos, las rojas, debido a su característico color rojo. Entre ellas destacamos la carne de ternera, buey, cordero… Las carnes blancas se las conoce así por su color menos rojo. Se trata de una carne más pálida, y en este tipo se catalogan las carnes de aves como el pollo, el pavo, o de animales como el conejo. En el mercado encontramos ambas variedades de carne, pero muchas personas no saben determinar sus diferencias.

La carne roja tiene ese color porque su contenido en mioglobina es alto. La mioglobina es una proteína que se encuentra en el músculo y es de donde nuestro organismo obtiene el hierro. La carne roja contiene altas dosis de hierro, muy beneficioso para el correcto funcionamiento del organismo y de fácil asimilación por parte de nuestro cuerpo. Esto hace que la carne roja sea muy recomendable para mantener unos buenos niveles de hierro.

Pero no todo es beneficioso con la carne roja, ya que sí que es cierto que contiene más hierro, pero también tiene más grasa en su composición, además de colesterol. Es un tipo de carne que nos aporta más calorías y un consumo abusivo puede causar enfermedades cardiacas y aumentar los niveles de ácido úrico. Es por esto que debemos limitar su consumo. No se puede comer todos los días este tipo de carne, ya que nuestra salud puede verse resentida.
La carne blanca por el contrario no contiene las mismas cantidades de hierro. Sí que es una carne rica en proteínas de alto valor biológico, por lo que es muy buena para mantener a nuestros músculos alimentados. Lo más importante de la carne blanca es su bajo aporte graso. Apenas tiene grasas saturadas y colesterol, lo que la convierte en una carne aliada de nuestra salud. Además, nos aportará menos calorías y su digestión es más rápida y eficaz. Por este motivo la carne blanca debe estar presente habitualmente en nuestra dieta.
Desde luego que debemos consumir los diferentes tipos de carne, ya que nuestro cuerpo necesita recibir todo tipo de nutrientes para funcionar correctamente, pero debemos saber cuál es la que más nos conviene y de la que podemos echar mano en cada momento.




martes, 18 de enero de 2011

Razones para consumir carne


El último grito de la nutrición fisiculturista circunda las dietas pre competencia bajas en carbohidratos y los beneficios de comer carne roja en vez de pollo o pescado. Esto significa que la carne roja esta una vez más en la cima de las tablas de entrenamiento y los planes de alimentación para formar masividad. Estoy seguro que Arnold y Franco estarían divertidos por este "desarrollo reciente" cuando ellos estaban comiendo carne roja tiempo atrás antes de un torneo en los años 70- mucho antes de que la investigación científica reforzara lo que la investigación empírica ya había probado. Para mejores resultados incluya la carne roja en una o dos de sus cinco o seis comidas diarias.

Aquí están los diez nutrientes que vienen con una dieta rica en carne roja.

1-La carne roja contiene creatina. La carne roja es particularmente efectiva en incrementar la fortaleza y promover el crecimiento muscular porque tienen un contenido de creatina más alto que cualquier otro alimento. La creatina es una fuente de energía del músculo, y le permite entrenar duro por mas tiempo llenándose de adenosin trifosfato {ATP}.

2-La carne roja contiene vitamina B6. Mientras mayor sea su necesidad de proteína mas vitamina B6 debe agregar a su dieta. Hay bastante de ella en la carne roja para estimular el sistema inmunológico, lo cual ayuda a mejorar la recuperación después de prácticas extenuantes, en tanto que promueve el metabolismo y síntesis proteica.

3-La carne roja contiene Carnitina. El pollo y el pescado son extremadamente pobres en carnitina y creatina. La carne roja en cambio está llena de ambas. La carnitina es necesaria para mantener normal el metabolismo de los lípidos y aporta aminoácidos de cadena ramificada BCAA.

4-La carne roja contiene potasio y proteína. El potasio es un mineral que esta escaso en la dieta de muchos atletas. Niveles bajos de potasio pueden inhibir la síntesis proteica así como la elaboración de la hormona de crecimiento y IGF-1.Los 2 últimos son hormonas usadas para estimular el crecimiento muscular. La carne roja es también rica en proteína: 100gr de carne magra aportan alrededor de 22 gramos de proteína de primera clase.

5-La carne roja es una fuente de CLA. Una porción de carne magra, por ejemplo, es comparable a una pechuga magra de pollo en contenido de grasa. Considere el hecho de que la carne roja está repleta de ácido linoleico conjugado [CLA] un potente antioxidante que combate las lesiones debidas a un entrenamiento en firme con pesas. También a sido demostrado que el CLA preserva la masa muscular actuando como agente anti catabólico.

6-La carne roja contiene zinc y magnesio. El zinc es otro antioxidante que contribuye a la síntesis proteica y el crecimiento muscular. Igual que con la vitamina B6 y la glutamina, el zinc refuerza el sistema inmunológico. El magnesio mantiene la síntesis proteica, mejora la fortaleza muscular y la eficiencia de la generación de insulina-hormona anabólica primaria del cuerpo.

7-La carne roja contiene hierro. El hierro es un constituyente de la sangre que abunda en la carne. Contrasta por completo con la miserable cantidad de hierro en las carnes de pollo pescado y pavo.

8-La carne roja contiene alanina. La alanina es un aminoácido empleado en la elaboración del azúcar de las proteínas dietéticas. Si su ingestión de carbohidratos es baja la alanina viene al rescate proveyendo a los músculos con energía para permitirles seguir entrenando. Lo hermoso de la alanina es que dispensa a los músculos de convertirse en energía en sus prácticas intensivas.

9-La carne roja contiene vitamina B12. Esta vitamina es esencial para la generación de glóbulos rojos, células que entregan oxigeno a los tejidos musculares. También ayuda al metabolismo de los derivados de los BCAAs para abastecer al cuerpo con la energía para el entrenamiento.


Carne a la semana


¿Cuánta carne debemos comer? Se debe comer carne dos o tres veces por semana, ya sea carne roja o blanca.


¿Cuánta carne a la semana?

Sea carne roja o blanca, la carne nos aporta proteínas de buena calidad que resultan fáciles de asimilar por el organismo.


Carne roja:

• Las carnes rojas son una excelente fuente de hierro, pero tienen muchas grasas escondidas que aumentan la tasa de colesterol malo (o LDL) y amenazan el sistema cardiovascular.
• Sera mejor limitar su consumo a dos porciones de 100 a 150 g por semana, preferentemente en la comida.


Carne blanca:

• Las carnes blancas contienen menos hierro, pero son mucho menos grasas que las rojas.
• Podemos comerlas tres veces por semana, unos 100 g, en la comida o en la cena.


Recomendaciones:

• En todos los casos, trata siempre de evitar las preparaciones con salsas. Mejor si las carnes son a la plancha o cocinadas en el horno.
• Puedes sustituirla por un huevo, por una rebanada de jamón magro, por un filete de pescado o incluso por un plato de legumbres mezclado con cereales.




lunes, 17 de enero de 2011

SALUD : NUTRICIÓN

Los beneficios de la carne

Algunas personas consideran que comer carne no es benéfico para tener una buena alimentación, incluso la eliminan de sus comidas diarias, sustituyéndola por carne blanca o definitivamente solo por frutas y verduras.
Pero porqué dejar de comer carne, ¿es bueno? ¿En verdad conocemos todas las ventajas que, el comer este producto animal nos brinda para vivir? Es cierto que el comer frutas y verduras diariamente, nos ayuda a mantenernos sanos y fuertes y que para los niños son esenciales para su crecimiento,  pero porqué no balancear todos los alimentos, incluir carne roja en las comidas también es sano y muy sano.
Conozcamos aun más que es la carne, los beneficios nos brinda en cada trozo, nutrientes, etc. La carne no es otra cosa que la parte comestible de los músculos de animales (vaca, oveja, cerdo, cabra, caballo, toro, y también se aplica este término a los animales de corral, caza, de pelo y plumas, y mamíferos marinos, aptos todos ellos para el consumo humano.
Entremos de lleno a los nutrientes que la carne aporta al ser humano; si a proteínas se refiere, la carne proporciona entre un 15 y un 20%, considerada de muy buena calidad y que además proporcionan todos los aminoácidos esenciales y necesarios. En cuanto a alimentos, es la mejor fuente de Hierro y Vitamina B12, aporta entre un 10 y un 20% de grasa (la mayor parte es saturada), la cantidad de Carbohidratos en muy poca y contiene entre un 50 y un 80% de agua. Otras vitaminas que aporta son del grupo B, Zinc y Fósforo.
Existen algunos factores que influyen en las condiciones nutricionales de la carne, como la edad del animal y la cantidad de ejercicio que realice; la alimentación, por lo regular, es de tipo industrial la cual, influye notablemente en el contenido y tipo de grasa. También la raza y el grupo muscular del que se trate, va a tener diferentes composiciones.
Dependiendo del contenido de grasa, las carnes de dividen en diferentes tipos, tales como:

Carnes Magras - Son aquellas con menos del 10% de materia grasa, de forma genérica se le considera a la de caballo, ternera, conejo y pollo.
Carnes Grasas – Aquellas en las cuales, su contenido de grasa es superior al 10%: cordero, cerdo y pato.
Pero es necesario considerar que ciertas partes del animal, pueden entrar en el primer grupo, por su contenido no tan alto grasa, como algunas otras partes: en el cerdo está el solomillo, el jamón, el lomo, o la lengua y el corazón de todos los animales.
Algunos nutriólogos recomiendan una cierta cantidad de carne para su consumo, en los adultos es de 150 a 200 g. tres veces por semana y en los niños las raciones serían de unos 15 g. por cada año de edad que se ingieran igualmente unas 3 veces por semana. Pero recordemos que entre mas grasa contenga el trozo de carne que vayamos a consumir, nos afectará más.
El tiempo de cocción también influye mucho en el contenido de nutrimentos que se pretendan captar en cada porción de carne que consumamos; cocer lentamente la carne destruye la mayoría de las vitaminas, aunque mejora la ingesta de proteínas, no altera ni el contenido de grasa ni en minerales, aunque todos esos nutrientes pasan directamente al caldo. Es mejor cocer la carne en olla de presión, porque de esa manera las vitaminas se conservan mejor. A pesar de que se podría pensar lo contrario, la carne cruda no es conveniente consumirla, pues no se aprovecha bien el hierro, es más difícil de digerirla y pierde su valor proteínico.
Para mantener la carne fresca, es necesario mantenerla en el refrigerador, y se debe consumir durante las primeras 48 horas o durante 72 horas si es que está congelada. No hay que lavarla y al momento de comprarla, es necesario pedir que los cortes sean piezas enteras y en ese momento. 

El buen uso de la carne

Beneficios de comer carne

La carne es un alimento que proporciona una gran cantidad de nutrientes, su presencia es indispensable en la alimentación de cualquier persona. Podrás incorporarla en tu dieta mediante el consumo de carne de vaca, cerdo, caballo, conejo, pollo y oveja entre otras, todos deberán ser sacrificados bajo condiciones higiénicas
Si la comes particularmente le aportara a tu organismo muchas proteínas, hierro, vitamina B 12, vitaminas del grupo B, zinc y fósforo, y una baja cantidad de grasa y carbohidratos. Se recomienda que las personas adultas coman 3 veces por semana alrededor de 200g. Y los niños también 3 veces por semana pero raciones de 20g. Por cada año de edad.

Detalle de la composición de la carne en 100g. (Cocinado al horno):
» Carne de cerdo magra: Proteínas 30g., lípidos 6.5g. Y calorías 180.
» Pata de pollo: Proteínas 22g., lípidos 7g. Y calorías 140.
» Pavo: Proteínas 26g., lípidos 2g. Y calorías 120.
» Conejo: Proteínas 25g., lípidos 5.9g. y calorías 165.
» Pechuga de pollo: Proteínas 24g., lípidos 3g. Y calorías 131.



viernes, 14 de enero de 2011


Estudios realizados por investigadores de Reino Unido de la Universidad de Essex afirman que sólo cinco minutos de ejercicios físicos al aire libre pueden contribuir en gran medida en la buena salud mental.
En esta investigación, publicada en el medio Environmental Science and Technology, sostienen que en los primeros minutos de ejercicios al aire libre (sin importar de qué clase sean ni en dónde se lleven a cabo) aumentan notablemente el ánimo y la autoestima de una persona, los cuales se mantienen durante toda la actividad física pero en medidas menores. Esto trae consigo un gran beneficio para las personas adultas y para quienes sufren de alguna clase de patología mental.
Con el fin de corroborar esta investigación, más de 1200 personas (tanto hombres como mujeres) se sometieron a diversos estudios del equipo de expertos de Jules Pretty. Estos análisis consistían en hacerles realizar a los sujetos de prueba múltiples actividades tales como jardinería, caminatas, ciclismo, paseos en bote, cabalgatas, y diversas actividades en parques y jardines.
La conclusión que los investigadores pudieron sacar fue que los más beneficiados resultan ser los jóvenes y quienes sufren enfermedades mentales.
Jules Pretty manifestó la importancia de que las personas que no realicen ningún tipo de ejercicio o deporte y tengan un alto nivel de estrés y nerviosismo sepan que los beneficios de realizar actividades al aire libre son realmente saludables.
En base a esto, también expresó que sería una idea interesante motivar a los trabajadores que se someten a largas jornadas de trabajo que en sus horas de descanso o de almuerzo realicen caminatas cortas al aire libre, lo cual ayudará en gran medida a aumentar su salud mental.